Entre 1939 y 1944, numerosos ciudadanos de Polonia llegaron a diferentes partes de Europa buscando refugio. Su país acaba de ser invadido, repartido y nuevamente había dejado de existir. Despojados de ciudadanía, pierden todos sus derechos, incluyendo el derecho a circular libremente por Italia, pudiendo ser internados en campos de concentración italianos por ser extranjeros, por ende, peligrosos, agravado, en el caso de los polacos judíos, por las leyes raciales establecidas ya desde 1938 por Benito Mussolini. Esta investigación indaga sobre un período de vida muy breve de esos migrantes y refugiados, polacos, católicos y judíos en Italia, a través de la gestión y asistencia diplomática de la Embajada de Chile en ese país.